Con frecuencia, se tiende a confundir la Atención Primaria de la Salud (APS) con el Primer Nivel de Atención, aunque ambos conceptos están interrelacionados, poseen distinciones fundamentales.
El Primer Nivel de Atención, junto con los servicios de urgencias y emergencias, constituye el primer punto de contacto entre los sistemas de salud y la población. Debe ser la puerta de entrada esencial a los servicios de salud, incorporando un sistema eficiente de Referencia y Contra Referencia. Es importante destacar que se trata de un nivel de complejidad de servicios, no simplemente de un modelo de atención. Aunque puede formar parte de un enfoque de APS, no es un requisito esencial. Existen ejemplos de servicios de primer nivel que, a pesar de ser ambulatorios y simplificados, no forman parte integral de una estrategia de APS.
La esencia de la APS radica en el compromiso con la salud de las poblaciones, abordando colectivos humanos y respondiendo a los perfiles de problemas y necesidades de salud con un enfoque integral que promueve la vida saludable y la prevención proactiva.
La APS se presenta como una estrategia para organizar y gestionar los servicios de salud en todos los niveles de complejidad, tanto en ámbitos públicos como privados. Aunque el Primer Nivel es crucial, la APS va más allá de este grado de complejidad. Su objetivo es garantizar que la ciudadanía acceda de manera oportuna a los recursos necesarios para mantener, preservar y restaurar la salud personal, familiar y comunitaria, favoreciendo la realización de proyectos de vida personales y sociales.
La atención programada, basada en las necesidades específicas de cada individuo o familia, establece prioridades y periodicidad para los contactos de atención médica y otros servicios de salud. Además, algunos países han implementado sistemas centralizados para asignar citas según prioridades, evitando la congestión de servicios y mejorando el acceso, especialmente para los más desfavorecidos. Mencionar el Registro Médico Electrónico Único (RMEU), un registro digital de datos de salud, podría reducir significativamente los gastos personales.
En términos equitativos, los países con sólida orientación a la APS suelen alcanzar resultados más eficientes, equitativos y con mayor satisfacción del usuario, en comparación con aquellos sistemas de salud con escasa orientación hacia la Atención Primaria en Salud (APS).