Nuestro organismo va cambiando significativamente a través de los años: a cada etapa de vida corresponden cuidados diferentes, el ciclo por edad, es un enfoque que permite entender las vulnerabilidades y oportunidades de invertir durante períodos tempranos del desarrollo humano; reconoce que las experiencias se acumulan a lo largo de la vida, que las intervenciones en una generación repercutirán en las siguientes, y que el mayor beneficio, puede derivarse de intervenciones previas en un grupo de edad anterior. Además, permite mejorar el uso de recursos, facilitando la identificación de riesgos y brechas y la priorización de intervenciones claves.
El ciclo vital puede dividirse en diferentes épocas del desarrollo, aunque no deben tomarse en forma absoluta y recordar que existe diversidad individual. La siguiente clasificación es un ejemplo: in utero y nacimiento, primera infancia (0-5 años), infancia (6 – 11 años), adolescencia (12-18 años), juventud (14 – 26 años), adultez (27 – 59 años) y vejez (60 años y más). La salud es un viaje que dura toda la vida, desde la infancia nuestros cuerpos experimentan importantes transformaciones, desafíos y oportunidades de bienestar. Al comprender los problemas más comunes, podemos ser proactivos para prevenirlos y ayudarnos a crecer sanos.
La medicina preventiva es la base de una atención médica, las pruebas diagnósticas, que se prescriben con el objetivo de detectar y tratar precozmente las afecciones, varían en función de la edad, el sexo, los hábitos y los factores de riesgo. Unido a esto, las revisiones periódicas, te permitirán disfrutar de la vida con plenitud, porque, aunque presumas de ‘estar bien’, los malos hábitos o algunos factores genéticos pueden predisponernos a padecer cáncer, diabetes o hipertensión.
Entonces, dicho lo anterior, para evitar enfermedades es necesario realizarse revisiones cada cierto tiempo. Pero, ¿con qué frecuencia? ¿Cuáles son los chequeos rutinarios más importantes? La edad para iniciar los chequeos médicos dependerá de la consideración del profesional de la salud, según historia clínica y exploración física:
-Análisis de sangre y orina. Debe ser anual desde el inicio de los chequeos médicos, que pueden comenzar a partir de los 18 años.
-Electrocardiograma. Sabías que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de mortalidad del mundo? Esta es una prueba de cardiología no invasiva recomendada a partir de los 45 años y cada cinco, que permite detectar problemas cardíacos a tiempo.
-Presión arterial. Debe llevarse un control anual, desde el inicio de los chequeos, porque la hipertensión es un factor de riesgo. Supone una mayor resistencia para el corazón, que responde aumentando su masa muscular (hipertrofia ventricular izquierda). A la larga, esta hipertrofia patológica (al contrario de la hipertrofia que se produce con el ejercicio) acaba siendo perjudicial pudiendo producir angina, arritmias e insuficiencia cardíaca. En cambio, una presión arterial baja puede ser causa de mareos o desmayos.
-Revisión ginecológica y prevención del cáncer de mama. La revisión incluirá una consulta médica, analítica, citología, ecografía ginecológica. Se recomienda que sea anual, desde el inicio de las relaciones sexuales. Y para prevenir el cáncer de mama, a partir de los 40 años, se sugiere la ecografía mamaria, la mamografía según la historia clínica de cada paciente.
-Revisión urológica del hombre debe ser a partir de los 50, si no hubiera antecedentes familiares de cáncer de próstata. En caso contrario, estas citas deberían adelantarse.
-Dermatología. Tener en cuenta que en la piel puede manifestarse el primer signo de muchas enfermedades internas. Cualquier persona debe consultar al dermatólogo si aparece un lunar o lesión en la piel; que antes no existía, pequeñas escamas o costras que no curan y duran más de un mes o aparición de un bulto de rápido crecimiento.
-Cáncer de colon. Afecta a hombres y mujeres a partir de los 50 o antes si hay historia familiar. La periodicidad del chequeo será individual y consistirá en una consulta médica, cuestionario específico, ecografía abdominal, colonoscopia endoscópica.
-Densidad ósea. Con la llegada de la menopausia o antes, si hay historia de fracturas por fragilidad, nuestro médico nos recomendará una densitometría.
-Tac de Pulmón o abdomen. El objetivo es identificar cánceres en etapa temprana, puesto que en un estadio muy precoz , es potencialmente curable.
El Ciclo de vida aborda las etapas en términos de la vulnerabilidad producida por la condición etérea, y cuando se comprenden a tiempo, muchos problemas comunes se pueden tratar con éxito para garantizar sanidad. Sin embargo, hay que considerar que la genética, los antecedentes familiares y los hábitos únicos influyen en tu bienestar. Es importante cuidarnos desde la infancia, ya que nuestro objetivo debería ser llegar a etapas avanzadas de la forma más sana posible, con menos enfermedades. Definitivamente, esto impactará de manera directa la calidad de vida de toda persona, por eso, te recomendamos ¡cuidar tu salud a partir de hoy!
